dimecres, 7 de gener del 2009

La vida bella

Me siento junto a ti,
junto a vosotras.
Respiro el aire que nos rodea.
Mi mirada recorre el lugar.
No decimos nada.
A veces sobran las palabras
porque el silencio es más elocuente.
Compartimos lo que tenemos.
Quizás tan solo un trozo de pan que,
al repartirlo,
hace que nuestras manos se rocen
para certificar con la calidez de la piel
que estamos vivos,
que somos,
que estamos,
que vivimos,
que la vida es bella
si la vives amando todo lo que te rodea,
si te amas a ti mismo,
si tu mirada es limpia
y tus palabras sinceras.
Me siento junto a ti,
junto a vosotras
para vivir la vida,
la vida bella.

Para Rosa y Mercè en Rochester (Gran Bretaña), sobre la mesa donde escribía Charles Dickens el 31 de diciembre de 2008