dimecres, 21 d’octubre del 2009

La guitarra no puede cantar sola

Que callada estás…
Ahí,
sola en un rincón
la guitarra resta en silencio.
¿Dónde están sus notas?
¿Dónde sus acordes?
¿Dónde su canción?

La guitarra no puede cantar sola.
¿Dónde están las manos, dónde sus caricias?
¿Y los dedos que arrancarán la melodía?

Qué callada estás…
Ahí,
sola en un rincón
el alma resta en silencio.
¿Por qué calla?
¿Dónde está su pasión?
Quizás anda perdida,
sin rumbo,
girando sobre sí misma,
buscando en un laberinto la salida,
una luz.

¿Y la fe?
¿Dónde está su fe?

El alma no puede cantar sola.
¿Dónde está su diós?


20 de octubre de 2009